Crawford hunde siete veces el puñal de los Gigantes en la agónica derrota de Miami
Esta debió ser una noche de celebración. Después de todo, José Fernández casi nunca pierde en casa, el equipo regresaba de una complicada gira e Ichiro Suzuki llegaba como el miembro más joven del club de los 3,000 hits.
Pero el bullpen de los Marlins insistió en fallar una y otra vez para endilgarle a su equipo el lunes una de las derrotas más dolorosas y largas en lo que va de temporada 8-7 en 14 entradas frente a los Gigantes de San Francisco.
Y si alguien le causó problemas al bullpen fue Brandon Crawford, autor de siete hits en la velada, incluido el decisivo en el 14to capítulo ante los envíos del abridor Andrew Cashner, luego de que los peces se quedaran sin relevistas.
Los Marlins no sostenían un choque de tantos innings desde que cayeran el 28 de junio del 2014 en casa contra los Atléticos de Oakland.
Cada vez que el relevo de los peces hacía aguas, era como si la tormenta que azotaba Miami fuera del parque se trasladara a las gradas y enfriara las esperanzas de los casi 23,000 aficionados en La Pequeña Habana.
No una, sino dos veces los Gigantes borraron desventajas, primero en la séptima para impedir que José Fernández se apuntara su victoria número 13 -habría sido marca personal- y luego en la octava para igualar a siete un choque que parecía irse ya del lado de los locales.
Si Fernández mantuvo a San Francisco en apenas una carrera, y con seis se quedó a solo dos ponches de los 200, hombres como Hunter Cervenka, Nit Witgren, Brian Ellington y Mike Dunn se encargaron complicar la situación al máximo.
El pitcheo de segunda línea de Miami permitió siete anotadas, 11 indiscutibles, regaló siete boletos y si el daño no resultó mayor se debió a un tremendo fildeo de Adeiny Hechavarría con las bases llenas en el 11no capítulo para cerrar el cero.
Afortunadamente, la ofensiva de los Marlins hacía su parte y conectaba 12 imparables, incluidos tres dobles y cuadrangulares de Martín Prado y Christian Yelich, ambos idos para la calle en la quinta.
De manera especial se destacó Yelich, quien remolcó cuatro por segunda vez en su carrera y se quedó a un triple de completar el ciclo, algo que no ha logrado ningún pelotero en la historia de la franquicia.